N A D A

Tengo una esquina llena de basura; los residuos de mis días,



El que sepa de qué estoy hablando, seguro recordará como soñábamos: sueños estúpidos, confusiones innatas, amores ocultos y amores sin rastro.


Decisiones que delatan las pasiones fuera de sarcasmo y dentro del enredo, y entonces susurro levemente un nombre: soplo fuerte hacia su cuello y recibo y gozo subiendo hacía mi pecho, mientras él trataba de estar sin entregar.


Me enfoco en un dolor real, un encuentro fatal, un amor que trató de matar; ¡qué va! Sólo fue por molestar, una noche en cama, y ¿qué más da?, cerveza por la mañana y un buen beso acompañado de trago barato para no cambiar.

Es...

Es el sonido relevante entre la hora que marca el reloj, es el color naranja que veo fuera de mi ventana, intentando resaltar objetos perdidos del alma.

O Tal vez sólo sea una impaciente delicadeza de verdes encuentros en los que no sólo él me encuentra, sino que ella se lo queda,         

¡bah!

 es un simple momento de ocio, ¡¡no más!!

Mis ojos cansados resaltan el breve paréntesis que es calma, resaltan un gusto que será obviado por parte de aquella mujer qué es decadencia, sinónimo de un placer que sólo ella encuentra en revolver la fe.

 ¿y qué?

 ¿y qué sí sólo quiero un revés cuerdo?

Me puede ser fácil encontrar las cosas para disfrutar,

me puede ser claro usar las situaciones a conveniencia de mi color natural, de mi esencia sin paz, es tener en paz mi gran tiempo de velocidad inusual, al ritmo de la ociosidad y así acabar…

sensación orgasmo, sensación gemido, sensación mi trago… 

Sólo es este gran sentido de tener aquí... en mi.

Tú eres mi calma...

Él

Esta vez no me dejo sola, y es de forma imprescindible y de una circunstancia inerte, soy un enredo, soy un enredo dentro que él disfruta dentro de esta calma…

Me dejo pasmada, con un aliento verde, de formas extraordinarias,  prefiero mencionar un encuentro realzado de circunstancias aventuradas y nada incautas; nada que me pueda arrinconar sin el deseo de tenerlo o de provocarlo.

Fue un excelente fin de semana… bien; mi pueblo, mi casa, mi vida y mi cama. Fue un excelente fin de semana, mi madre sólo dijo: “me alegra que Él sea tu calma”